A fines del siglo XIX bajo las políticas estatales de incorporación del territorio mapuche a la economía nacional, llega el ferrocarril a la región de la Araucanía. El desarrollo y construcción del proyecto ferroviario estuvo a cargo de la empresa norteamericana “North and South American Company’. Empresa que contaba con la asesoría de ingenieros norteamericanos y europeos, quienes incorporaron en el contexto regional una arquitectura de estaciones con aires de la arquitectura ferroviaria rural europea. Esta arquitectura de construcción rápida, simple y racional, fue el modelo más asertivo ante las necesidades del estado, y fue así como el modelo se estandarizo y multiplico en el ramal central y en los primeros ramales de la región (Temuco, Carahué y Púa-Curacautin). Esta arquitectura prolifera en la región desde 1889 hasta 1914, periodo en donde leñadores, ingenieros y carpinteros hicieron uso de la abundancia de finas especies, como el roble pellín para piezas estructurales. Laurel y raulí para el revestimiento de paramentos interiores y radal para terminaciones y utensilios.
“El 10 de noviembre de 1982, el tren pasaba por primera vez el gran puente de Quillen y hacia su entrada en Lautaro. El acontecimiento fue celebrado con gran fiesta, con espavesamiento, banquete y los discursos usuales. Ahora se trata de prolongar la línea hasta Temuco” (GustaveVerniory) en este contexto histórico se construye la primera estación de Lautaro (demolida) y junto a ella la casa del jefe del servicio ferroviario la que es citada en esta ficha de registro cuya data aproximada de construcción coincide con el año de llegada del ferrocarril.
Descripción arquitectónica:
Se emplaza en un sitio aislado en los terrenos pertenecientes a la Empresa de los Ferrocarriles del Estado, contiguo a la antigua estación de trenes de la ciudad (demolida) su fachada principal se relaciona directamente con la línea férrea. La casa no es un elemento mayor mente reconocible en su contexto principalmente por su condición de aislamiento y a su entorno degradado por edificaciones comerciales de baja calidad material (terminal rural) lo que sumado a la no incorporación de su frente principal a alguna vía vehicular refuerzan esta condición.
Se compone a partir de un solo cuerpo volumétrico, de planta rectangular, simple y simétrica, carente de toda ornamentación. El volumen es coronado por un gran techo a cuatro aguas. Originalmente la casa constaba con un corredor perimetral que recorría tres caras de la fachada, abriéndose hacia la línea del tren y la antigua estación. Este corredor perimetral fue cerrado en todo su perímetro por ventanas de palillaje cuadrado, siendo estas las mismas que antiguamente cubrían parte del corredor perimetral de la antigua estación de trenes (demolida). Su encumbrada techumbre reparte las aguas de forma simétrica y tensiona verticalmente el volumen hacia el centro de la cumbrera más alta. Los sobrecimientos que recorren todo el perímetro de la casa son trabajados con pierda de cantera. Según relato de GustaveVerniory estas piedras eran extraídas de la cantera de Cuyanquen distante a unos dos kilómetros al sur de Lautaro y también eran ocupadas para construir las fundaciones y estribos de los puentes ferroviarios.
El corredor perimetral que abraza la vivienda en tres de sus frentes actúa como una piel espacial generando una antesala o espacio de transición que marca la llegada a la casa. La organización interior se genera a partir del hall de acceso o espacio núcleo distribuyendo y comunicando directamente hacia el estar principal. Los espacios interiores se relacionan directamente unos de otros por puertas dobles y simples generando un continuo de circulaciones que fusiona los espacios otorgando una mayor amplitud y flexibilidad en la distribución interior.