Sobre la data exacta del año de construcción de esta obra no se tiene antecedentes precisos, pero se aproxima al periodo del año 1920, que fue el de mayor desarrollo económico de la ciudad en donde se construyeron la mayor cantidad de edificios de orden neoclásico.
La Sociedad Broussain Hnos. adquirió por compra a la Soc. Tihista Hnos. e inscribieron la propiedad en el año 1910.
Actualmente la propiedad pertenece a la familia Gutierrez.
Descripción arquitectónica:
Se ubica en pleno centro urbano de la ciudad. Por un lado se enfrenta a la principal arteria comercial (calle O’Higgins), paralelo a este también se ubican la plaza de armas y el edificio municipal que data del año 1907.
En sus bordes priman edificaciones de altura media, que mayoritariamente retoman el orden neoclásico en la expresión de sus fachadas lo que genera un continuo en la escala y expresión arquitectónica de calle O’Higgins otorgando un valor agregado a su emplazamiento el cual tiene una fuerte carga histórica y simbólica para la memoria colectiva ciudadana.
El edificio recorre la esquina envolviéndola en todo su borde, generando una fachada continúa hacia sus dos frentes (calle O’Higgins y Bilbao), el edificio toma doble altura en la fachada principal marcando el segundo nivel que da cuenta de la vivienda.
Su principal característica formal radica en la ornamentación neoclásica de su fachada, balcones, columnas, revoques y detalles en alto y bajo relieve refuerzan esta condición. Tras la fachada de dos pisos aparece un cuerpo simple completamente de madera techado a dos aguas que alberga la vivienda.
El programa distribuye una sucesión de locales comerciales que se abren hacia la calle, sin mayor creatividad espacial, los cuales solo se tornan en una distribución funcional para acoger una actividad comercial. Los locales envuelven un patio interior que genera un vació en el centro del volumen total.
Un largo corredor paralelo a uno de sus bordes remata en una escalera que conecta con la vivienda en el segundo nivel.
La vivienda distribuye una sucesión de espacios públicos y privados organizados simétricamente a ambos lados a través de un corredor que se abre y remata hacia la calle por medio de un pequeño balcón que domina visualmente calle O’Higgins.
El terremoto de febrero de 2010 produjo daños a la edificación debiéndose demoler el segundo piso.